martes, 20 de enero de 2009

Prosa de un protestante

Protesto porque no están conformes mis ojos.
No es por amargura, sino por insatisfacción.
Protesto, luego de conocer lo bueno; debe ser mejor.
Si protestar me hace un renegado, debo decir que no.
El renegado huye, el protestante busca ser vencedor.

El ser humano debe ser libre, para que pueda madurar.
La protesta abre puertas y es el hombre quien debe andar.
La andanza no es sólo divago,
pues en ella se encuentra la razón.
La lógica a veces está desquiciada,
pero sólo un protestante la puede ver en su vocación.

1 comentario:

g a b y m o r t e m dijo...

la libertad de expresion ..